jueves, 7 de febrero de 2013

Cuento.-

                                                      Luz en el aula Rosacruz.-
Para Marta y la señora Nelly.-
 "La bondad es sabiduría".- Daniel.-
 Es un día veintisiete, hay sesión en la sede de la Fraternidad Rosacruz de Oro, son las seis de la tarde y el aula se dispone a escuchar al maestro Israel Rojas que mira el reloj y da comienzo  a la reunión mensual; está de pié sobre una tarima, viste pantalón, chaleco y chaqueta del mismo color claro, erguido, de frente ancha y rostro de semblante bondadoso, nariz larga y bien formada, orejas grandes y mirada escrutadora, tiene visión de la totalidad de los asistentes a los que se dirige con voz firme y de sonoridad amable:
-Hermanas y hermanos, agradezco su asistencia, en el día de hoy vamos a referirnos a hombres  grandes de la Historia que de una manera o de otra han dejado un mensaje en favor de la reencarnación, doctrina antiquísima que defiende nuestra Fraternidad; empezamos por la cabeza mayor, el mismísimo Jesucristo donde los Evangelios recogen sus palabras cuando ve una higuera en llamas y manifiesta ser el profeta Elías, fallecido muchos años antes; el poeta Goethe dice que gracias a la reencarnación puede entender la preparación y desarrollo de mentes prodigiosas como las de Platón y Mozart, el precusor de la independencia de los Estados Unidos como Benjamín Franklin, el inspirador de la Revolución Francesa como Rousseau y los líderes de la Revolución Hispano- americana como Francisco Miranda y Simón Bolivar, el escritor Balzac, aceptaron la reencarnación como expresión natural de la realización humana, con ella se amplían los horizontes de la vida y se rompe el yugo de la muerte que destruye los creado y lo conseguido por cada criatura. En la doctrina Rosacruz la muerte es un estado de transición, reflexivo y autocrítico para volver a una nueva vida con las ilusiones de un amanecer; es también un bello encuentro con los seres amados que siguen sus procesos de manera paralela, ocupando posiciones para resolver conflictos y ataduras creados en anteriores vidas; el Universo busca que cada uno sea pleno y se realice y con ellos la sociedad entera, que ésta como aquellos necesita transformarse para encontrar respuestas  a sus dificultades y estancamientos; la luz tiene que prevalecer sobre las tinieblas y la felicidad sobre la desgracia, la sabiduría sobre la ignorancia y la dicha sobre el dolor; es difícil pero es posible y la razón de ser de la reencarnación es facilitarlo; desde aquí y ahora les invito a verla con alegría, como una buena nueva, que tengamos oportunidades para superarnos, el amor triunfa a través del tiempo y del espacio como lo quieren los poetas y soñadores, gracias.- Fin.-

                     Vitelio Chisant
                                                         Martorell, 8 de febrero de 2013.-

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