jueves, 31 de mayo de 2012

Cuento.-

                                                       Un viaje en espiral.-
Para Francisco Guerrero y Gemma.-
A: Javier Pereira Jáuregui.-
 " La ensoñación es la fuerza de los corazones pálidos ".- Daniel.-
 Graciela Bassabe muere sin conocerse bien la causa; con veintisiete años de edad su fallecimiento produce sorpresa en médicos y familiares, en especial de su amante Rafael Quintero que decide pedir a los sueños que le lleven hasta donde está ella para consolarla y averiguar su temprano deceso.
 Rafael Quintero domina las técnicas del sueño, consistentes en moverse con libertad dentro de su desarrollo sin perder contacto, a voluntad, de su vida presente.
  Llega el momento esperado, Rafael Quintero se duerme y sueña viajar en espiral, a gran velocidad, sin perder el conocimiento, es decir, sin despertarse; llega a un bello jardín rodeado de árboles robustos, ve a Graciela Bassabe sentada en una silla de piedra, conversando con otro hombre, atractivo y bien vestido.
-Graciela, amor mío, estoy en un sueño y vengo a contemplarte, también a indagar por qué me dejaste tan pronto-; Rafael Quintero se acerca hasta ella, le intenta coger las manos, lo que resulta imposible porque son de aire, lo mismo ocurre con su hermoso rostro y su esbelto cuerpo.
-Amado mío -le contesta Graciela Bassabe con voz dulce-, pronto despertarás y te darás cuenta que yo estoy en un sueño y que es inútil que me busques fuera de tí, estoy solo en tu corazón y ahí permanezco.
 -Dime ¿ por qué estás con otro hombre, quiere esto decir que ya no me amas ? -Rafael Quintero se altera tanto con el reproche que se despierta de inmediato, sin volver a soñar con ella y sin descubrir las causas de su muerte.
 Desolado, acude a una médium famosa a quien comenta lo sucedido, la médium entra en contacto con Graciela Bassabe que se limita a decir:
 -El amor por mí de Rafael no fué suficiente para evitar mi muerte y tampoco lo es para dejarme tocar en sueños. Fin.-
                              Vitelio Chisant
                                                        Barcelona, 29 de mayo de 2.012.-

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